Tras el dato de inflación, el BCRA volvió a bajar la tasa de interés y la fijó en 40%

Alentado por el dato de inflación de abril, el Banco Central decidió una nueva reducción de 10 puntos porcentuales para la tasa de interés de referencia. De esa forma, la tasa nominal anual se ubicará en el 40%, lo que equivale a una tasa efectiva del 49,15%.

La medida del BCRA se conoció poco después de que el INDEC informara que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de abril fue del 8,8%, por debajo de lo esperado, al mismo tiempo que muchas consultoras comienzan a publicar estimaciones para el índice de mayo, situándolo entre el 5 y el 6 por ciento.

Se trata de la quinta baja de la tasa de interés determinada por el BCRA en un plazo de casi dos meses. El 12 de marzo la bajó de 100% a 80%; el 10 de abril, de 80% a 70%; el 25 de abril, de 70% a 60%; una semana más tarde, el 2 de mayo, profundizó la baja del 60% al 50% mientras que hoy volvió a hacer otro agresivo recorte.

Para graficar cuánto vienen pagando los depósitos minoristas, un plazo fijo en el Banco Nación a 30 días de plazo por un monto de $100.000 venía pagando una tasa del 40%, lo que implica que a su vencimiento pagará $103.287,67, es decir, $3.287,67 de intereses o un interés mensual del 3,29 por ciento. Un recorte de diez puntos a esa tasa implicaría que el rendimiento del mismo depósito caería cerca del 2,5%. Así, los $100.000 a lo largo de un mes entregarían $2.500 pesos.

El Banco Central alinea esta estrategia con la necesidad de reducir la expansión monetaria endógena proveniente de los intereses de los pasivos remunerados, en línea con la «licuadora» de pesos de la economía.

La decisión también se correlaciona con la necesidad de estimular la participación del sistema financiero en el financiamiento del Tesoro, y, en la otra mano, empujar a los bancos a la expansión del crédito en la economía con menores tasas de interés, que a la vez puedan ser fuente de recursos de la «actividad bancaria» en lugar de las colocaciones en el Banco Central.

A través de un comunicado, el BCRA resaltó que “la firmeza del compromiso del gobierno con la meta de déficit fiscal cero acrecienta la credibilidad en el ancla central del programa económico y afianza un sendero de baja de las expectativas de inflación”. Ese compromiso, señaló, le facilitó al Central “contraer en términos reales aquellos factores que en años anteriores alimentaron crecientes desequilibrios monetarios e impulsaron la inestabilidad inflacionaria.